Son muchas cosas las que influyen en la decisión de la mafia del COI para elegir ciudad olímpica.
Nosotros nos tenemos que flagelar por la ridícula presentación del proyecto, que salvo el principito, al que se vio profesional y desenvuelto en estas lides, los demás rozaron lo grotesco.
Pero es que arrancamos de falta de claridad en los conceptos. Los Juegos Olímpicos antes de Samaranch eran una ruina y estuvieron a punto de desaparecer. Pero llegó el lince de Samaranch que lo mismo intimaba con Franco que con la URSS y se dió cuenta del enorme pastel que se estaba a punto de perder. Cambió las estructuras y hasta el espíritu amateur de las Olimpiadas y las convirtió en los Juegos Olimpicos de los profesionales. O sea cambió el espíritu del deporte por el del negocio, de otra forma hubieran desparecido, eso también es verdad.
En este punto logicamente entraron a formar parte de la fiesta las grandes compañías transnacionales. El COI adoraba a Samaranch, era su gurú, el que les había hecho ricos, más ricos aún quiero decir. Así que le debían una y le dieron los Juegos a Barcelona en el 92.
A partir de la desaparición de Samaranch del COI el poder lo tomaron lógicamente los que más dinero tenían en juego.
Cuando ahora les han presentado un proyecto "austero" se han aterrorizado, normal, no le hables a un magnate de austeridad. No cuadra grandes negocios con austeridad, poca liquidez y falta de confianza en la economía. Bastante escamados están ya con haberle dado los Juegos a Río de Janeiro que está teniendo retrasos en la ejecución y protestas callejeras importantes antes incluso de empezar. Eso no lo quiere el COI ni en pintura.
Y aquí aparece el jeque Ahmad Al-Fahad, mafioso entre mafiosos, que tiene buenos motivos para que salga elegida Tokio. Este fulano es el que domina casi todos los comités olímpicos de Asia, Africa y buena parte de Europa.
Resulta que el pájaro, primero, acaba de firmar un megacontrato de suministro de petróleo con Japón. Chúpate esa.
Pero además su hombre en Europa es Tomas Bach, casualmente elegido nuevo presidente del COI. Zas, en toda la boca.
Y claro, Tomas Basch es alemán, ¿ y quien se va a presentar a los Juegos 2024? . Berlín. ¿Y que pasa si los Juegos de 2020 se celebran en Europa? Pues que en 2024 no pueden ser en Europa, por lo que Berlín queda fuera. Cerrado el círculo.
No nos engañemos, los Juegos Olímpicos son lo mismo que Operación Triunfo, un producto de la tele.
A parte de que tengo mis dudas de que hubieran sido tan "rentables" para España, ni siquiera anímicamente porque en el estado de coma catatónico en que se encuentra el pais una "aspirina" como esta no creo que hubiera supuesto nada sustancial.
Vamos a centrarnos en lo verdaderamente importante y dejarnos de fiestecitas superfluas de resultado incierto.