JoseMariCondePlaya
Usuario activo
- Mensajes
- 60
- Puntos
- 0
Gracias, gracias y más gracias .
Por fin en casa, atrás quedan meses de angustia, temor, miedo e inseguridad, por una serie de eventos que pusieron a prueba mi fe y mi amor a Dios. Nunca temí por mi vida pero si por aquellos que dejaría en la estacada, todos esos amigos que depositaron su confianza y dinero en el proyecto del DESAFIO SURF ACTION, por ellos si sufrí y reconozco haber llorado en la oscuridad de los calabozos y no por las torturas y vejaciones a las que fui sometido, sino por el temor a defraudaros . Fueron momentos difíciles, pensamientos de suicido y auto mutilación llegaban a mi mente, pero cuando creí ver el fin de mis días, en ese preciso instante, una luz cegadora inundo mi celda y una voz sonó dentro de mi cabeza “JoseMari -me dijo- todo lo que sucede, sucede por una razón. Es un imperativo seguir viviendo, y la vida es mentira que es para sufrir e ir al cielo”. Ahí comprendí que debía luchar y que mi momento no había llegado, cada hombre tiene un momento para morir y este no era el mío. Así, que sin mayor dilación, me puse a excavar un túnel de cientos de metros con la única ayuda de mis manos, gracias a Dios no encontré roca, y pude escapar hacia el mar. Una semana nadando día y noche, guiado por un sexto sentido que me llevó a Paguera (mi secret spot).
Amigos, no pude completar la travesía, mi Tecno yace en el fondo del mar, ametrallada por el ejercito argelino. Una tabla campeona no debería morir así, pero los caminos del señor no siempre son fáciles.
Hoy escribo estás líneas desde casa, en la seguridad del hogar, es en estos momentos de serenidad y sosiego cuando siento la llamada de mi Tecno y una fuerza irresistible me empuja hacia el mar en busca de esa sensación de libertad que solo los windsurfistas conocemos.
Gracias
Por fin en casa, atrás quedan meses de angustia, temor, miedo e inseguridad, por una serie de eventos que pusieron a prueba mi fe y mi amor a Dios. Nunca temí por mi vida pero si por aquellos que dejaría en la estacada, todos esos amigos que depositaron su confianza y dinero en el proyecto del DESAFIO SURF ACTION, por ellos si sufrí y reconozco haber llorado en la oscuridad de los calabozos y no por las torturas y vejaciones a las que fui sometido, sino por el temor a defraudaros . Fueron momentos difíciles, pensamientos de suicido y auto mutilación llegaban a mi mente, pero cuando creí ver el fin de mis días, en ese preciso instante, una luz cegadora inundo mi celda y una voz sonó dentro de mi cabeza “JoseMari -me dijo- todo lo que sucede, sucede por una razón. Es un imperativo seguir viviendo, y la vida es mentira que es para sufrir e ir al cielo”. Ahí comprendí que debía luchar y que mi momento no había llegado, cada hombre tiene un momento para morir y este no era el mío. Así, que sin mayor dilación, me puse a excavar un túnel de cientos de metros con la única ayuda de mis manos, gracias a Dios no encontré roca, y pude escapar hacia el mar. Una semana nadando día y noche, guiado por un sexto sentido que me llevó a Paguera (mi secret spot).
Amigos, no pude completar la travesía, mi Tecno yace en el fondo del mar, ametrallada por el ejercito argelino. Una tabla campeona no debería morir así, pero los caminos del señor no siempre son fáciles.
Hoy escribo estás líneas desde casa, en la seguridad del hogar, es en estos momentos de serenidad y sosiego cuando siento la llamada de mi Tecno y una fuerza irresistible me empuja hacia el mar en busca de esa sensación de libertad que solo los windsurfistas conocemos.
Gracias